PROPÓSITO:
“Para recuperar su identidad los hombres de hoy necesitan volver a las Escrituras a fin de nutrirse de los valores que Dios mismo indica para sus vidas”.
INTRODUCCIÓN:
Muchos son los mensajes, predicaciones, conferencias, seminarios, congresos que se hacen alrededor de los hombres de hoy.
Hemos encontrado frases como:
- las tres F´S enemigas del Hombre: Fama, Fortuna, F
- las tres F´S características de un Hombre: Feo, Fuerte, F
- “Ser de sexo masculino es cuestión de nacimiento, pero ser Hombre es cuestión de decisión”
- Alguien decía “cualquiera puede hacer un hijo; pero se necesita un hombre para ser padre
He tenido el privilegio de asistir a varios de esos congresos y sigo preguntándome
“¿qué pasa con los hombres de esta última generación?”
El hombre de hoy se ha acomodado, está en la búsqueda del mínimo esfuerzo, quiere un respeto que no se ha ganado, un lugar que no ha merecido, quiere tener lo que no ha luchado. Quiere ser esposo y no se casa, “sigue una vida de soltero”, quiere ser padre y no está dispuesto a pagar el precio, quiere tener amigos, pero no está dispuesto a ser amigo, quiere que se le vea como líder, pero no se le ve con la manada, quiere ser llamado hijo de Dios pero se comporta como hijo del diablo, quiere ser salvo pero no vive el reino de Dios aquí en la tierra. El Señor JESUCRISTO dijo: “Arrepentíos porque el reino de los cielos se ha acercado”
Uds. hombres y yo necesitamos acercarnos al reino de Dios en humildad, con una verdadera actitud enseñable y decirle a Dios “HEME AQUÍ”
O como la película “reto de valientes”: ¡YO LO HARE!
Cuando pienso en mi proyecto como padre y ahora como abuelo recuerdo mi infancia, yo era un niño muy rebelde, terco, obstinado, violento, agresivo, pero también recuerdo que mi mamá decía cuando me veía llorar “no llore que los hombres no lloran”.
Fui creciendo y creyendo que los hombres no debían expresar sentimientos. Creí erradamente, que llorar o expresar sentimientos era de mujeres. Dios se encargo de enseñarme todo lo contrario.
Un hombre para realmente ser un padre como Dios quiere que sea necesita tener sensibilidad y compasión.
La combinación de estos elementos es la que produce la clase de hombría que a nuestras familias y sociedad les urge hoy.
El concepto de ser hombre ha sido distorsionado por una cultura machista y agresiva. Como si fuera poco, las luchas por defender los derechos de la mujer, la igualdad de género en algunos casos, han degenerado en un desprecio por el rol masculino, lo cual ha dejado como legado una verdadera confusión acerca del significado de ser hombre hoy.
La Palabra de Dios tiene el perfil a través de hombres de Dios a quienes el Señor usó grandemente.
JOB es uno de ellos, y hoy quiero invitarlos para que meditemos en este maravilloso modelo.
Mire le digo algo si Proverbios 31 nos habla de la mujer virtuosa, el capitulo 29 de Job nos habla de una verdadera hombría como padres
Lectura del texto JOB 1:1,5
CAP 29 desde el 2
Empecemos con lo primero ¿Qué concepto tenía Dios de él?
Lo más importante es el Concepto de Dios. No el concepto de la sociedad o de sus amigos. Hoy debemos empezar a preguntarnos ¿QUÉ CONCEPTO TIENE DIOS DE MI?
Hubo un varón en tierra de Hus, llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, y temeroso de Dios, y apartado del mal. Job 1:1
Quiero compartirles algunos parámetros de un hombre y padre altamente efectivo.
1-. UN HOMBRE Y PADRE ALTAMENTE EFECTIVO ES SACERDOTE DE SU FAMILIA.
Job 1:5
Era un hombre con sensibilidad espiritual. Estaba abierto a detectar la necesidad espiritual de sus hijos e interceder por ellos. Era un hombre con diez hijos, pero con tiempo para velar espiritualmente por cada uno de ellos. Eso nos indica que era un intercesor comprometido por cada uno de sus hijos. Un hombre con constancia espiritual.
La Biblia dice que de esta manera hacía todos los días.
Lo que más seguridad da a una familia es vivir con un hombre que entiende y ejecuta su papel de sacerdote. No es ser simplemente religioso, es ser coherente con su vida. Que su estilo de vida hable más duro que sus músculos.
la religión no es lo que da seguridad a la familia, sino un estilo de vida que se ve fortalecido por su intimidad con Dios. Recuerdo que alguien decía, “el hombre solo es grande cuando esta de rodillas ante Dios”. Interceder por cada miembro de la familia nos permite ver en acción el poder de Dios en el hogar. Hay un poder secreto que se libera cuando un hombre cae de rodillas para orar por su esposa y sus hijos.
2-. UN HOMBRE Y PADRE ALTAMENTE EFECTIVO CONOCE SU HERENCIA DIVINA.
JOB 29:2-5.
Albert Einstein decía:
“Intenta no volverte un hombre de éxito, sino volverte un hombre de valor”.
Cuando tenemos una herencia divina, esa herencia nos sostiene en los momentos críticos y nos revela el propósito de Dios delante de nosotros. Una de las cosas que más fortalece la vida de la esposa y de los hijos es vivir con un hombre que interpreta todo lo que le pasa a la luz del proceso de Dios a lo largo de su vida.
Lo que determina como miro el futuro se haya enraizado en lo que Dios ha sido para mí en el pasado y en el presente.
Vivir sin una herencia divina es cavar la tumba para nuestros sueños y para los milagros. Un hombre que no ha desarrollado su corazón de padre o que ha perdido ese corazón, vivirá amargado ante las circunstancias de la vida sin poder interpretar su entorno a la luz de la herencia de Dios que ha estado tejiendo en su propia vida.
3-. UN HOMBRE Y PADRE ALTAMENTE EFECTIVO ESTÁ ABIERTO Y ACCESIBLE A SUS HIJOS.
JOB 29:5
No llegaba cuando ya estaban dormidos. Llegaba para emplear tiempo en su relación. Esto implica comunicación, acercamiento y camaradería.
Describe a un hombre con relaciones tanto verticales como horizontales. Así como Dios estaba con él… sus hijos también. Habla de Dios “conmigo” (Vertical) y los hijos “alrededor” de mi. (Relación horizontal). Muchas veces encontramos hombres que sólo disfrutan de una relación vertical con Dios, pero ignoran la relación horizontal con sus hijos.
La Biblia habla de Job como un hombre de comunión. Compartía con sus hijos. Elemento vital y necesario en la familia de hoy. Cuando permitimos que Dios desarrolle en nosotros hombres con el corazón de pastor que cuida por sus ovejas, las ovejitas y corderos (hijos) nos rodearan y al tenerlos cerca, los podremos ministrar.
4-. UN HOMBRE Y PADRE ALTAMENTE EFECTIVO INSPIRA RESPETO.
Job 29:7-10.
Que descripción tan imponente del respeto que Job gozaba de la gente que le rodeaba. Era un hombre importante y en su posición era respetado.
Él describe que los jóvenes se sentían impregnados de respeto hacia él. Y Los ancianos transmitían respeto a él. Se entiende por ancianos, no la gente entrada en años, recordemos que en la Biblia anciano se refiere en muchas ocasiones a la gente de trayectoria en el pueblo. Job también habla de los gobernantes de la ciudad ya que menciona que los príncipes o profesionales preferían callar y los políticos tragaban sus palabras.
¡El respeto no es algo que se impone, es algo que se gana!
Ese tipo de hombre se busca con urgencia hoy en todos los estamentos de nuestra sociedad tan deteriorada
5-. UN HOMBRE Y PADRE ALTAMENTE EFECTIVO TRANSMITE JUSTICIA.
Job 29: 14-17.
“Mejor que el hombre que sabe lo que es justo es el hombre que ama lo justo”.Confucio
Qué interesante es ver como Job supo combinar, diferenciar y ejecutar la Misericordia y la Justicia.
No era un hombre que se dejaba arrastrar por la mayoría. Tenía sus convicciones bien firmes y las defendía. No era una marioneta manejado por sus amigos ni por las circunstancias.
No cambiaba la verdad por la popularidad. Su vestido era justicia y su cabeza cubierta de juicio. Era ojos al ciego y pies al cojo.
La misericordia es determinante en nuestra vida de relaciones. Recordemos que hay tres palabras que se parecen en su contenido y descripción en la Biblia, pero que son muy diferentes en el enfoque. Esas tres palabras son: Gracia. Justicia y Misericordia.
Gracia es cuando recibo lo que no merezco. No merecía la salvación, pero Dios por su gracia me la dio.
Justicia es cuando recibo lo que merezco. Si cometo homicidio y voy a la cárcel eso es justicia. Es lo que merezco.
Misericordia es cuando no recibo lo que merezco. Merezco que la justicia caiga con su peso sobre mí, pero Dios en su misericordia me rescata. Un padre altamente efectivo sabe aplicar correctamente estas tres palabras en su familia, primeramente.
Cuán segura se siente la familia con un hombre que sabe equilibrar Misericordia, Gracia y Justicia.
6-. UN HOMBRE Y PADRE ALTAMENTE EFECTIVO ES REALMENTE SABIO.
Job 29:20-25.
¿Quién es el hombre sabio? Un hombre sabio es el que sabe lo que tiene que hacer en el momento correcto, la forma exacta y con el espíritu alineado con la voluntad de Dios. Usted no necesita un título universitario para ser sabio. Job era hombre sabio que recibía honra y era oído y compartía esperanza.
Un hombre sabio no será reprochado. Un hombre sabio esta rodeado de sedientos de respuestas claras. Job era un hombre sabio que impartía alegría, dirigía y consolaba.
CONCLUSIÓN:
La crisis de hoy demanda hombres modelos. El modelo de Job todavía hoy es posible, porque Dios vive. Comencemos por ser temerosos de Dios y apartados del mal. Y recordemos…., detrás de nosotros viene la esposa, los hijos, las generaciones y los cercanos, poniendo sus pies en la huella dejada por nosotros en el polvoriento camino de la vida.
El llamado de Dios a los hombres no es a una postura de agresión, sino a una fortaleza que inspire a conocer íntimamente el corazón del Padre, que sirve de ejemplo, de compasión y bondad.
Ser hombres, en el sentido más completo de la palabra, solamente es posible cuando entendemos que el Señor no nos llamó a una religión, sino a una relación de intimidad que produzca un estilo de vida conforme a lo que Dios quiere.
Cristo, el ejemplo más sublime que haya existido de ser hombre, puede enseñarnos a ser hombres conformes a la imagen de Dios. Aunque él fue increíblemente fuerte y valiente, se describió a sí mismo como manso y humilde (Mt 11.29).
La combinación de estos elementos es la que produce la clase de hombría que a nuestras familias y sociedad les urge hoy.
Tomado de la película: “reto de valientes”
Como ser el padre que debo ser: ahora creo que Dios desea que cada padre se proponga valientemente hacer lo que haga falta para involucrarse en la vida de sus hijos; pero además de estar aquí o proveer para ellos debe caminar a su lado acompañándolos y siendo una imagen clara del carácter de Dios su padre celestial.
Un padre debe amar a sus hijos y buscar ganarse su corazón, deben protegerlos, disciplinarlos y enseñarles la palabra de Dios, debe enseñarles a caminar con integridad y respetar a los demás, debe instar a sus hijos a que sean hombres y mujeres responsables para que vivan sus vidas según los valores eternos.
Algunos hombres escucharán y lo ignorará pero les digo que como padre son responsables ante Dios por la posición de influencia que él les ofreció. No pueden quedarse dormidos al volante para despertar un día y darse cuenta que su trabajo o sus hobbies no tienen valor eterno como lo tienen las vidas de sus hijos.
Algunos hombres escucharán esto y se burlarán pero no tendrán la fuerza para aplicarlo, en cambio vivirán para ellos mismos y desperdiciaron la oportunidad de dejarle un legado sagrado a la próxima generación, pero habrá otros hombres que a pesar de los errores cometidos en el pasado, a pesar de lo que nuestros padres no hicieron por nosotros, pondremos todo el empeño posible y dedicaremos el resto de nuestros días a amar a Dios y enseñarle a nuestros niños que hagan lo mismo, y cuando sea posible amar y sean el mentor de quienes no tienen un padre en sus vidas, pero qué necesitan ayuda y dirección con desesperación; invitamos a cualquier hombre cuyo corazón tenga la voluntad de unirse a nosotros en esta resolución.
En mi hogar esa decisión ya fue tomada:
No pregunten quién guiará a mi familia porque por la gracia de Dios yo lo haré, no tendrán que preguntar quién le enseñará a mi hijo a seguir a Cristo porque yo lo haré, quien aceptara la responsabilidad de proveer y proteger a mi familia yo lo haré, quién pedirá a Dios que rompa las cadenas de esquemas destructivos en mi historia familiar yo lo haré, quién orará y bendecirá a mis hijos para que realicen con valentía lo que Dios les pida hacer yo soy su padre yo lo haré, acepto esta responsabilidad y es mi privilegio abrazarla, deseo la gracia de Dios y su bendición en mi hogar, ¡cualquier hombre lo desea! por eso en dónde están los valientes, dónde están los padres temerosos del señor es hora de levantarnos y responder al llamado que Dios les ha hecho y decir: ¡yo lo haré ,yo lo haré, yo lo hare!
QUE TODOS LOS HOMBRES AL FINAL DEL CAMINO PODAMOS DECIR:
¡¡¡ANTES DE OIDAS TE HABIA OIDO, PERO AHORA MIS OJOS TE VEN!!!
